“Hoy ser chef es una profesión reconocida, con posibilidades en cualquier parte del mundo. Es una carrera que te mantiene aprendiendo siempre”, señaló Veliz en Radio La Ciudad.
Véliz recordó que años atrás dedicarse a la cocina no era una elección bien vista. “Antes los padres se resistían. Hoy hay más apoyo, pero sigue siendo importante dejar que los chicos elijan lo que los hace felices. La gastronomía abre puertas y te conecta con el mundo”, sostuvo.
Su vocación nació en la infancia, entre las manos de su abuela, que preparaba tortas y comidas típicas. Sin embargo, su ingreso al mundo culinario fue casual: “Estudiaba administración, pero tuve que dejar la carrera para trabajar. Entré a un restaurante como ayudante de mozo, y de a poco fui aprendiendo todo. Un día faltaba el pizzero, otro el cocinero, y ahí estaba yo”.
A los 24 años ya dirigía el área de alimentos y bebidas del Hotel Naindo, con más de treinta personas a cargo. “Fue un desafío enorme, pero esa experiencia me dio una visión integral de la cocina. Siempre les digo a los jóvenes que trabajar en un hotel es la mejor escuela”, aseguró.
En 2013 inauguró su propio restaurante, Orígenes, donde consolidó su sello personal: la cocina regional riojana. “Después de tantos años haciendo cocina internacional, quería mostrar lo nuestro. Cocinar con identidad”, explicó.
A lo largo de su carrera, Véliz cocinó para figuras como Cristina Fernández de Kirchner, Néstor Kirchner, Mauricio Macri y Alberto Fernández, además de embajadores y artistas. “No importa la política. Cocinar para un presidente es un orgullo profesional, una experiencia que te abre puertas”, afirmó.
Actualmente lidera Finca del Este, un emprendimiento gastronómico que combina producción propia con eventos y catering. “El objetivo es tener una cocina sustentable, con nuestras verduras y frutas, sin herbicidas. Es cerrar el círculo de lo que uno sueña como chef”, resumió.